En la siguiente entrada sobre
Táctica en fútbol trataremos un nuevo concepto y principio táctico muy útil
para sorprender en el juego y generar carga física al rival al correr detrás
del balón. En esta ocasión vamos a ver el principio ofensivo sobre el ritmo de juego.
El ritmo de juego como principio táctico ofensivo [Táctica en
fútbol]
El ritmo de juego
consiste en acciones que durante el partido no varían en cuanto a intensidad,
manteniendo el esfuerzo. El ritmo de
juego muestra una serie de aspectos favorables como los siguientes:
- Alternar juego corto con largo, junto a cambios de orientación.
- Imponer el ritmo deseado.
- Manifestar un ritmo alto mantenido.
- Ser muy importante para mantener la intensidad, alternando diferentes ritmos para sorprender.
Por
otro lado, resulta importante el ritmo de juego para mantener la estructura y
equilibrio táctico. Para ello es necesario:
- Mantener la confianza y la seguridad.
- No caer en acciones individuales.
- No destruir líneas.
- Pensar en positivo ante posibles adversidades.
- Tener concentración.
Imagen. El ritmo de juego es importante para mantener la estructura y equilibrio táctico.
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